El pasado 21 de junio se celebró el solsticio de verano, la esperada época para quienes prefieren los rigores del calor, las vacaciones en la playa y los chapuzones en las piscinas. Un 21 de junio de 1905 también nació en París el escritor y filósofo francés Jean-Paul Sartre, padre del existencialismo.
Este gran pensador del siglo XX sufrió problemas de visión durante toda su vida, ya que a los cuatro años quedó tuerto del ojo derecho y, a los 77 años, perdió la visión del ojo izquierdo a raíz de una trombosis venosa, agravada por hipertensión y abuso del alcohol y los opiáceos. Las experiencias del filósofo con el dolor y la enfermedad le sirvieron de inspiración para algunos de sus postulados teóricos. Lee con atención la enseñanza que encierran estas palabras de Jean-Paul Sartre:
“Felicidad no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace”.
Pilar Díaz Aguilar
