• Salva Martín
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La importancia de los simulacros

Entender la importancia de los simulacros es quizás la parte más difícil de una preparación, ya sea del Eir, del Mir o de una Ope. Todo el mundo sabe y entiende que cuando quieres una plaza, tienes que estudiar un montón (de esto podríamos hablar largo rato, porque es una verdad a medias…), y, por tanto, se asume que, en este tipo de caminos, los que van dirigidos a las ansiadas plazas de personal estatutario fijo o de especialista, necesitas dedicar mucho tiempo a estudiar. Sin embargo, entender la importancia de los simulacros es algo que suele costar un poco más. En muchas ocasiones se consideran una herramienta menor, se infravaloran, o se dejan para cuando el opositor tenga tiempo (ya que lo más importante y prioritario es estudiar). Y esto es un problema grande y un obstáculo hacia la ansiada plaza.

 

Por mi experiencia en el Eir durante muchos cursos de preparación, he visto que intentamos aprender la mayor parte del temario posible, a lo que dedicamos mucho tiempo, incluso de forma casi obsesiva, y colocamos en un lugar inferior la realización de los simulacros. El resultado suele ser siempre el mismo, que llegamos al examen con una “panzada” a estudiar, con el temario “memorizado” (“se que esto estaba en la página 25, arriba”) y sin embargo, no conseguimos la plaza esperada. Frustración y sensación de que el Eir, el Mir o la Ope es muy difícil…  Y es una pena, porque el motivo no es que no hayan hecho el esfuerzo que requiere (esto es la parte más difícil, estar dispuesto a pagar el precio que pide esa ansiada plaza en horas, esfuerzo…), sino que no hemos sabido invertir bien nuestro esfuerzo en función del objetivo que buscábamos. Nos hemos dedicado a estudiar, pero no a ser eficientes. Hemos ido sin un rumbo claro.

 

Los simulacros, en cualquier curso Eir, Mir o de Ope, son una herramienta de aprendizaje brutal, además de un sensor individualizado de tus mejoras / carencias, y cómo no, un ensayo de aquello a lo que te vas a enfrentar. Porque puede ser justo o no, pero el tribunal que te examina no quiere saber si eres buen o mal profesional, se supone que ya tienes tu título, y, por tanto, ya has demostrado que tienes capacidad, sino que necesita, de una forma objetiva, ordenar a los aspirantes. Y esto lo hace a través de preguntas de test. Nada más sencillo que esto. Posiblemente no es la forma más justa, ni la que selecciona a los mejores profesionales, ni la que premia incluso a los que más han estudiado, pero es la más objetiva y la que permite distribuir las plazas de una forma consensuada y conocida previamente.

 

Vamos a unir esta parte con lo que he dicho antes de que no es necesario estudiar tanto. En efecto, no es necesario hacer tratados de los diversos temas. Es un error profundizar mucho en los conceptos. ¿Por qué motivo? Pues principalmente, porque el conocimiento es infinito, por tanto, es imposible que lo adquieras todo, siempre podrías estudiar un poco más, y por otro lado, porque el conocimiento que llevas a un examen de este tipo debe ser muy flexible. Por eso es clave saber resumir y simplificar los conceptos que estudias, y luego enfrentarlos a muchas preguntas de test.

 

Tienes pocas probabilidades de que te pregunten los conceptos que has estudiado “tal cual” los has estudiado, y bastantes probabilidades de que lo que has estudiado caiga en el examen, pero no textual. Por tanto, cuando estudias algo, necesitas que sea sencillo, lógico, simple y no muy extenso, pero eso sí, muy manejable, muy flexible, que comprendas todas sus caras, para que, te lo pregunten como te lo pregunten, sepas responder. Y eso lo consigues con los simulacros y con las preguntas de test.

 

Porque cada vez que haces una pregunta de simulacro, cada vez que tu enfrentas un conocimiento adquirido a una pregunta de simulacro, lo haces más flexible, más entendible y además, tienes muchas más opciones de recordarlo más adelante. Al final, se trata de pasar de un conocimiento lineal a un conocimiento multidimensional. Es decir, que en lugar de estudiar conceptos rígidos y por repetición, necesitas ver que un concepto tiene muchas caras diferentes, y puede ser preguntado de muchas formas, incluso desde varias asignaturas. Esto es el conocimiento multidimensional, o flexible, que te permite adaptarlo a muchas más preguntas y sacar más puntos en un examen. Conseguir este cambio es clave, entender esto es fundamental para mejorar el rendimiento en un examen tipo test.

 

En esta línea de entender los simulacros como una herramienta de aprendizaje, existe otro argumento que lo reafirma. Seguro que muchas veces has estudiado algo y, al cabo de un tiempo, tienes la sensación de que se te ha olvidado casi todo. Una sensación que produce mucha frustración. Esto nos pasa a todos, aunque tendemos a pensar que “solo me pasa a mí”. Por eso necesitas repasar tantas veces un tema. Sin embargo, existe una forma de evitar que esto pase, y es corregir las preguntas que te han caído en un simulacro. Si te has estudiado la anticoncepción hace un mes, investigación hace dos semanas, y esta última semana farmacología, tienes una oportunidad única de volver a repasar corrigiendo un simulacro. Y, además, de una forma más dinámica y menos “aburrida” que el típico estudio lineal y de memoria, o por repetición.

 

Corregir un simulacro es una forma de estudio es vital en la preparación de un examen tipo test, ya sea el Eir, el Mir o una Ope. De hecho, si lo pensamos de otra forma, es una manera más amena de estudiar. Imagínate que una tarde en la que tienes que estudiar 5 horas, ¿suena a monótono? Imagínate ahora esa misma tarde, con 3 horas de estudio, y otras 2 horas de corrección de un simulacro. ¿Suena más ameno, o al menos, más asequible? Yo creo que sí. Necesitamos integrar la corrección de los simulacros en el estudio diario.

 

¿Y por qué no lo hacemos? Porque sentimos que “estamos perdiendo tiempo de estudiar”. Y por eso quizá cuesta más hacerlo. Si cambias el chip, y entiendes que la corrección de los simulacros es una herramienta con la que estudiar, verás como tu rendimiento es mucho mayor. Recuerda, usa los simulacros para que tu conocimiento sea flexible y multidimensional, y también para repasar los temas que ya has visto.

 

Aprovecha las preguntas de test y los simulacros a tope, verás cómo mejoras tus resultados y consigues tus objetivos. Cambia el chip. Hay otras formas de aprender.

 

Twitter: @Javi_EirCTO

Instagram: @Javi_Matrón

Profesor CTO. Matrón.

Coordinador de Simulacros y de Obstetricia / Ginecología.

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