A medida que la demanda de atención sanitaria de alta calidad continúa su crecimiento, se hace cada vez más patente la urgencia de contar con enfermeros altamente capacitados y especializados.
“La enfermería está llena de oportunidades emocionantes, y el EIR podría ser tu llave para desbloquearlas”
En este artículo, exploraremos cómo dar el primer paso hacia la preparación del examen EIR puede resultar beneficioso, no solo para perfeccionar tus habilidades como profesional de la salud, sino también para abrir nuevas puertas en tu carrera profesional y trazar un rumbo hacia un futuro aún más prometedor.
Beneficios de presentarse al EIR
Son muchos los beneficios de presentarse al examen y superarlo, pero a continuación, destacaremos los más significativos.
1. Especialización: Supera el examen EIR y trabaja en el área de la enfermería que siempre has soñado
Desde el momento en que decidiste dedicarte a la enfermería, es probable que hayas tenido una visión clara de tu futuro en la profesión. ¿Siempre te has imaginado trabajando en un campo de la enfermería que te apasiona? ¿Fue precisamente esa visión lo que te impulsó a embarcarte en el emocionante viaje de la formación en enfermería? Si tu respuesta es un rotundo “sí”, entonces, considerar la opción de presentarte al Examen EIR es una decisión que podría acercarte a ejercer tus funciones en el campo de la enfermería que siempre has soñado.
Las especialidades que recoge el EIR son: Enfermería Obstétrico-Ginecológica (Matrón/a), Enfermería Familiar y Comunitaria, Enfermería de Salud Mental, Enfermería Pediátrica, Enfermería Geriátrica, Enfermería de Cuidados Médico-Quirúrgicos y Enfermería del Trabajo.
2. Acumula experiencia profesional durante dos años ininterrumpidos durante el periodo de interno, tras superar el examen EIR
Al concluir la carrera de enfermería, a menudo te enfrentas a una realidad laboral marcada por una gran cantidad de contratos temporales. Esta dinámica te lleva de un sitio a otro, a veces incluso te sumerge en especialidades, centros o puestos de trabajo que distan de ser tus preferidos. La búsqueda de estabilidad se convierte en un desafío constante, ya que, en muchos casos, no puedes elegir dónde trabajar, sino que debes ir allí donde te llaman. Esta falta de control sobre tu destino laboral puede generar inseguridad y añadir una dosis adicional de complejidad a tu transición del mundo académico al profesional en el campo de la enfermería.
Una vez que hayas completado con éxito el examen EIR, abrirás las puertas a una nueva etapa en tu carrera profesional. Durante estos dos años posteriores, no solo continuarás adquiriendo conocimientos y habilidades, sino que también disfrutarás de un empleo remunerado en el área de especialización que siempre has deseado. Esta experiencia te permitirá crecer tanto personal como profesionalmente, mientras acumulas méritos que harán de tu perfil uno más interesante, lo que se traduce en una mayor posibilidad de empleabilidad en un futuro. Para un perfil especializado y con experiencia, es más sencillo conseguir un contrato estable o incluso una plaza fija en futuras oposiciones.
3. Abre las puertas a una posible carrera académica
Es posible que, además de experimentar una profunda vocación por el cuidado de los pacientes, sientas el llamado hacia la posibilidad de embarcarte en un doctorado. Comenzar una carrera académica con la meta de convertirte en profesor universitario o permanecer en el ámbito de la investigación puede resultar sumamente seductor para muchas personas. Es crucial tener en cuenta que, después de completar con éxito el EIR, se te abre la oportunidad de acceder directamente a un programa de doctorado. Esto significa que no estás cerrando ninguna puerta y tienes la flexibilidad para explorar diferentes caminos en tu carrera profesional.
El EIR no es solo un desafío educativo y profesional, sino que también representa una puerta abierta hacia un futuro prometedor en el ámbito de la enfermería, ofreciendo numerosas recompensas tanto a nivel profesional como personal o académico: ampliará tus horizontes de empleabilidad en el futuro, además de que te brindará la oportunidad de adentrarte en el mundo de la investigación a través de la posibilidad de realizar un doctorado. Pero, sobre todo, te allanará el camino hacía el ejercicio de aquella especialidad que siempre has deseado.